Entender el lenguaje corporal de su perro es vital para su
educación y su convivencia con las personas de su entorno. Sería maravilloso
que pudieran hablar el lenguaje humano, pero su comunicación es mediante
sonidos y lenguaje corporal.
Los perros nos son objetos, son seres sintientes,
están provistos de sentimientos y los expresan a través de un gesto o de un
ladrido, aullidos o sonidos agudos y graves.
Que debe de tener en cuenta para saber, ¿que nos quiere
decir nuestro perro?
Observe la voz de su perro
Su perro produce una amplia gama de sonidos, gruñidos,
gemidos y ladridos. Los gemidos pueden ser indicativos de que el perro tiene
miedo, esta enfermo o ansioso. Pero otros lloriquean cuando están muy
emocionados y van subiendo el tono. El ladrido de un perro no es necesariamente
señal de agresión, ellos ladran cuando están alegres o también aburridos y
frustrados.
Observe la boca de su perro
El labio superior rizado exponiendo sus dientes es señal de
que esta agitado o de pronta agresión. Un perro feliz esta con la boca
relajada, cerrada o ligeramente abierta o también jadeando. Un perro ansioso
también puede jadear.
Observe los ojos de su perro
Los ojos de un perro feliz son luminosos y de tamaño normal.
Cuando algo les sorprende pueden exagerar su expresión y levantar los parpados
inclinando su cabeza. La agresión o el miedo ya es diferente, su pupila
aumenta, se nota el blanco de sus ojos y su mirada se torna salvaje. La
agresión dominante hace que el perro fije sus ojos en una persona o animal.
Posición de la cola
Mover la cola no solo es síntoma de felicidad pues hay que
verlo en otros contextos. Cuando un perro pone su cola entre las piernas es
síntoma de miedo. La cola de un perro dominante siempre está rígida y en alto.
Si tenemos sus orejas en punta, cola rígida, cuerpo tenso y mostrando sus
dientes nos avisa de inminente agresión.
Observe las orejas de su perro
Cuando él está escuchando o esta alerta las orejas se ponen
en la posición más alta de su cabeza. Si está un poco hacia atrás está en
estado de ánimo amistoso. Cuando están temerosos o sumisos las tienen hacia los
lados y más aplanadas sobre la cabeza.
Posición de su perro
Cuando están juguetones inclinan sus patas delanteras y
dejan las traseras levantadas. Si está feliz sus músculos están relajados y
flexibles. Si tiene miedo puede encorvar la espalda o encogerse a tierra. Un
perro dominante tensará sus músculos y se echará hacia delante mientras que el
sumiso, se pondrá boca arriba sobre su espalda estirando una pata.
